Oficina de apoyo a la salud de las Religiosas en México

Hacia un diagnóstico de las necesidades de salud integral de las Hermanas / Presentación Inicial

Constataciones sobre la Vida religiosa femenina en México y la visión de este proyecto

Punto de partida: dónde estamos y qué buscamos

  1. La atención a la salud integral de las hermanas y la promoción del envejecimiento saludable y creativo es estrategia fundamental para el futuro de la VR femenina en México. Atender la salud integral de las religiosas es la mejor apuesta para el mediano plazoEn qué se fundame1nta esta afirmación? Los datos de la pirámide demográfica son contundentes. Las dos encuestas significativas que hemos realizado arrojan un dato unánime constante: la configuración poblacional de las vida consagrada femenina es claramente la de una pirámide invertida.
  • ¿En qué se fundamenta esta afirmación? Los datos de la pirámide demográfica son contundentes. Las dos encuestas significativas que hemos realizado arrojan un dato unánime constante: la configuración poblacional de las vida consagrada femenina es claramente la de una pirámide invertida.

[Grafico de la pirámide poblacional]

  • Las hermanas mayores de 65 años representan casi la mitad del total de las hermanas. (47%). Mientras que las menores de 45 años, apenas representan el 23% del total.
  • La pirámide de la vida religiosa femenina agudizará su tendencia al envejecimiento en las próximas décadas, al menos en un periodo de 20 a 30 años, aun si aumentara el ingreso de vocaciones.
  • Además, el tema de la perseverancia vocacional a través de las etapas complica, aún más, la posibilidad de siquiera paliar la reducción tan significativa que está en curso.
  • Promover la salud integral es nuestra mejor alternativa.
  1. Promover la salud integral es la estrategia más fundamental para fortalecer la vocación, vida y misión, de la vida religiosa de mujeres en México. Un futuro viable requiere emplear muchos recursos, bien orientados y articulados en sinergias inteligentes, audaces y creativas.
  • Hablar de salud integral es una noción amplia y rica que supone mucho más que responder a los requerimientos inmediatos ante la enfermedad de las mayores. Significa definir un cambio estratégico que afecte a toda la comunidad, monasterio o Congregación.
  1. Atender la salud integral es poner las condiciones para que las comunidades realicen una política institucional que, conforme la edad de las hermanas, potencie sus mejores posibilidades humanas y espirituales, contengan los factores que aumentan el deterioro físico, emocional y cognitivo y atiendan las enfermedades con oportunidad.

De qué realidad de salud partimos en la vida religiosa de mujeres en México

  1. Las condiciones de atención a la salud no son las mismas en todas los institutos. Hay institutos con riqueza de recursos y tecnología para tener bien definida una política de salud integral y otras muchos institutos, que son la mayoría, no cuentan con los mínimos para atender a las hermanas y menos se plantean una política de salud integral

  2. Enfermedades más comunes entre las religiosas

Condiciones generales de salud; padecimientos (2012)

  • Diabetes
  • Hipertensión arterial
  • Hipercolesterolemia
  • Enfermedades del corazón
  • Embolia
  • Cáncer

Enfermedades más frecuentes en religiosas en México (2022)

  • Sistema osteoarticulares, lesiones y fracturas, y pérdida de la movilidad
  • Cardiovasculares
  • Enfermedades de la vista
  • Gastrointestinales

Problemas osteoarticulares: los más frecuentes y más costosos para las congregaciones

Enfermedad que más gastos implicaron para las congregaciones de mujeres

  • Osteoarticulares: lesiones, columna vertebral, fracturas, prótesis y en general dolores en espalda y problemas de movilidad.

Cirugías más frecuentes en las congregaciones de mujeres

  • Problemas osteoarticulares como fracturas, lesiones, prótesis

Indudablemente uno de los temas más recurrentes y de primerísimo orden son de índole de sistema esquelético y de la movilidad. ¿Por qué? quizás por el tipo de ocupaciones realizadas en la juventud, por tensiones emocionales derivadas en desgastes o por descuido de las señales tempranas de enfermedad.

Qué recursos para atender a las Hermanas Mayores y enfermas

  1. En general constatamos que las comunidades que tienen más de 100 hermanas tienen mejores recursos para enfrentar la enfermedad y el cuidado de las enfermas que las que tienen menos de 100 hermanas
  1. Cuándo se les atiende

¿Qué motivos permiten notar que una hermana requiere cuidados especiales. Lo más común es que la hermana tenga repetidos fracasos en las actividades pastorales, sufra accidentes, ya no puede trabajar o se agrave su enfermedad (en el 41% de los casos). Lo más dramático y frecuente (50% de los casos) es que las superioras sean las que perciban el deterioro y no precisamente la hermana mayor la que da a saberlo.

  1. En dónde se le atiende

Solo una cuarta parte de los ancianas o Hermanas enfermas (26%) viven en comunidades totalmente dedicadas a su cuidado. Mientras que el 38% de ellas todavía están dedicadas a actividades ministeriales. Por otro lado, un tercio de las Hermanas Mayores se dice que están jubiladas (32%) y que viven en comunidades de pastoral.

  1. Acondicionamiento de las habitaciones

46% de las Congregaciones de menos de 100 miembros no dispone de habitaciones con baño específico para Hermanas Mayores o enfermas, mientras que, en comunidades más numerosas, solo el 17% no tiene esa facilidad.

  1. Camas especializadas

Porque 4 de cada 10 congregaciones no tienen camas especializadas disponibles para Hermanas en situación de ser cuidadas, a pesar de que las necesidades son crecientes. Aún más, hay una diferencia muy significativa entre congregaciones y monasterios, en la disposición de camas especializadas, las congregaciones de < 100 hermanas y monasterios tienen menor disponibilidad.

Las congregaciones que tienen menos de 100 hermanas tienen más problemas para tener al menos una cama habilitado para la atención de enfermas. Casi la tercera parte de las congregaciones con menos de 100 miembros no tienen camas especialmente habilitadas

  1. Asesoría para la atención a las mayores y enfermas

Los institutos difícilmente tienen equipos que las asesoren en la atención a las hermanas mayores. Casi el 80% de las comunidades tampoco tienen asesorías. Hasta el 80% de congregaciones no tienen asesorías.

  1. Equipos de cuidadoras

En las congregaciones de menor tamaño sólo un 28% cuenta con ello. De modo que mientras más pequeña sea la congregación, será más difícil encontrar equipos con cuidadoras. Lo mismo sucede con los monasterios. Todo depende de una o varias hermanas.

  1. Alternativas de actividades adecuadas a la condición de las enfermas o mayores

La enfermedad o el retiro se hace más difícil de asumir cuando supone gran inactividad. La carencia de actividades suele vivirse dramáticamente. El 62% de las congregaciones más pequeñas carece de este recurso.

  1. Cultura de la prevención

Sólo una tercera parte de las Congregaciones (36%) convocan a sus hermanas a periodos de Formación Permanente o se proveen chequeos médicos de rutina y apenas la cuarta parte de los monasterios hace este tipo de convocaciones para las hermanas (25%). Eso significa que la prevención y cuidado previo de la salud está lejos de ser una cultura en la vida religiosa femenina.

  1. Atención psicológica y psiquiátrica

Únicamente la tercera parte de las Congregaciones acceden usualmente a esta atención psicológica y/o psiquiátrica (36%), mientras que más de la mitad de las comunidades no utiliza regularmente el auxilio psicológico psiquiátrico para las Hermanas en esta condición (56%).

  1. Coberturas de salud

Apenas el 6% de institutos cuentan con coberturas de salud. Más de 25% de congregaciones acuden a la atención al IMSS o ISSTE, mientras que apenas el 8% de los monasterios lo tiene. Los monasterios acuden en su mayoría a la atención médica gratuita (Seguro Popular), y el 20% no cuenta con ninguna cobertura; lo que los hace más vulnerables ante las situaciones emergentes.

  1. Gastos de salud

El 50% gasta entre 25% y 60% de su presupuesto en cuidado de la salud de este contingente de mayores que aumenta sostenidamente. Un 18% de congregaciones dicen que gastan entre 60% y 75% en estos gastos de salud

Qué recursos para atender a las Hermanas Mayores y enfermas

  1. Nos quedan muchas preguntas por aclarar, entre ellas.
  1. Cuál es el porcentaje de religiosas que padecen enfermedades incapacitantes para realizar tareas ABVD (Bañarse, vestirse controlar esfínteres, alimentarse por sí misma, higiene personal y aseo)

  2. Cuando vienen los cambios biológicos durante el paso hacia la etapa post reproductiva – menopausia, qué riesgos adicionales hay de padecer enfermedades crónicas como hipertensión arterial y diabetes mellitus.

  3. Cuál es la incidencia de cáncer en religiosas en México, edades y tipos de cáncer, edad en qué incide.

Sobre todo, cuáles son las condiciones de vida cotidiana, comunidad y trabajo que predisponen para enfermedades crónica, reducir sus fuerzas, para revertirlas